Este año se ha celebrado el 800 aniversario del la firma de Magna Carta por el rey Juan I de Inglaterra en Runnymede. Mi tierra. Runnymede es, para mí, y aunque esto suene extraño, una parte de mi ser. Por una sencilla razón. Es la tierra donde me crié y dónde viví los primeros años de mi vida. Me marcaron para siempre, y además es una tierra de una belleza sencilla, fresca y limpia. Es un lugar donde se aúnan muchas cosas. Yo entiendo que Runnymede encarna pureza y razón por el paisaje y los hechos que allí acontecieron.
El documento que firmó el Rey Juan I y del que se conservan hoy cuatro copias en Inglaterra, se puede interpretar (como todo) de varias maneras. Yo me quedo con la versión de Kipling que dedicó un poema al documento y en él dice:
- No freeman shall be fined or bound,
- Or dispossessed of freehold ground,
- Except by lawful judgement found,
- And passed upon him by his peers.
O, siguiendo una traducción propia:
- Ningún hombre libre será multado o encarcelado,
- O privado de su tierra,
- Salvo tras un juicio justo,
- Ejercitado por sus iguales.
Me quedo con esta interpretación del sentido del documento que es de la forma que se ha querido interpretar a lo largo de la historia, incluso ha sido citado en numerosos textos, como en la primera constitución de los Estados Unidos. Esta interpretación del documento ha hecho de él inspiración para muchos otros documentos de gran calado, y aunque realmente Inglaterra aún hoy no tiene una constitución escrita (esta Carta Magna se fue alterando y modificando a lo largo de los años) tiene inherente a su creación el espíritu sobre el que se fundamentan muchas constituciones. Es cuestión de sacar de ella, como de todo en la vida, lo bueno, y desechar lo malo.
Hoy se interpreta como un documento que defiende al hombre común aunque en realidad originalmente era un documento que daba a los barones, a la aristocracia, poderes y así acotaba el poder absoluto del Rey. En todo caso y como he dicho antes todo se subroga a la interpretación que hagamos del texto y ahora hay dos bandos enfrentados que interpretan la Carta de las libertades cada uno a su manera.
Yo me quedo con el Espíritu del Magna Carta, cómo lo han hecho los que han celebrado los fastos este año en Runnymede. Mi tierra. https://www.youtube.com/watch?v=90TOHJZLRE8
Yolanda Canales