Dijimos que Podríamos O la versión moderna de “donde dije digo, digo Diego”

La señora Carmen Lomana, sí, ella, me ha interesado en esto. Yo no soy “apolítica” que se dicen muchos, porque estimo que aunque no tengamos interés en ella, en la política, nos afecta a todos. No tengo un interés activo en la política, (que puede ser lo que quieren decir los demás cuando se autodenominan “apolíticos”) pero voy a opinar porque parece ser que todo el mundo opina sobre ciertos temas en concreto y no quería dejar esta ocasión pasar. El hecho de que la señora Carmen Lomana tenga opinión sobre estas personas, se relacione con ellos, para mí es llamativo. Sinceramente es el único aspecto de ella que me decepciona. Últimamente me había fijado en ella, en su lado elegante, realmente elegante, su corrección y su amabilidad, entonces no entiendo que pueda representar a “Podemos”¸yo creía que ella era menos Talibán, más moderada. Me pregunto si ella también está engañada.

Si ganara Podemos, digo “si ganara” no hará lo que parece ser que propone, porque ya empieza a dar bandazos y ya no dice las cosas con la claridad que lo hacía al principio. Estoy segura de que no hará lo que decía en un principio porque realmente se vería en una encrucijada difícil. ¿Cómo resolver la situación cuando los demás se han visto obligados por las circunstancias, cuando han llegado al gobierno? ¿Qué ha ocurrido en Grecia? ¿Qué querría los que voten a Podemos que hiciera? ¿Lo que ha prometido o lo que obliga la Ley? Sinceramente no sé qué sería peor. Pero de lo que sí estoy segura es que si se les vota, por quien les vote, será porque se creen que eligen la opción menos mala. Por rebeldía. Eso lo entiendo pero estoy convencida de que ahí habría un error. Lo comparo con tirarse por la ventana para no quemarse. Sólo digo que votemos a quien votemos lo hagamos convencidos y sabiendo por qué lo hacemos. También creo que a los partidos políticos (a TODOS) se les debería obligar a cumplir las promesas electorales y si no no permitir que las hiciesen. La verdad, es decir, la ausencia de la mentira, parece ser que ya no tiene valor; yo lo valoro tremendamente.

En cuanto a la señora Carmen Lomana, me pregunto qué dirá si por casualidad ganara Podemos (aunque he visto por ahí que ya hay un “hashtag” que reza #PodemosNoGanara No sé si es “Podemos no ganará” o “(si) Podemos no ganara”. No sé si es convencimiento o inseguridad. No sé si realmente alguien a estas alturas cree que ganarán y si eso fuera así harían lo que dicen y se comportarían como parece ser que se comportan. Bueno todo esto lo digo desde la perspectiva de una neófita en cuanto a la cosa política, pero ya les digo el hecho de que Carmen Lomana se interesara por esto me intrigó. No me lo puedo creer, Carmen Lomana me hace seguir más de cerca a la cosa política. Bueno, después de haber leído hoy que a Belén Esteban le había corregido una carta un catedrático ya me puedo creer cualquier cosa… Ya dije que eso efectivo si es pero es pero también lo es matar una mosca a cañonazos. (La mosca muere, seguro).

Yolanda Canales

Carpe Diem

La primera vez que escuché esas palabras y que realmente me llamaron la atención fue en la película Poseidón. Recuerdo que uno de los protagonistas se iba a suicidar y en el momento que se iba a lanzar por la borda se enfrentó con una ola gigante que se le acercaba y que fue la que finalmente volcó el transatlántico. Le cambió la vida. Era un barco de lujo en el que iban unos pasajeros a celebrar el Año Nuevo y además de ser la típica película de desastres, tenía de fondo un mensaje que a mí ya por aquel entonces me llamó mucho la atención y ahora la tengo muy presente. Carpe Diem. Se suele traducir como “vive el momento”. En realidad es “agarra el momento y vívelo”. “sieze the moment” se traduce al inglés. Toma el momento y exprímele el jugo. No sé si es así pero yo así lo entiendo. Yo así hago ahora. Hago todo lo que puedo por no desaprovechar ni un solo segundo de mi vida.

Creo que tenemos que tocar fondo. Es lo que se suele decir. Tocar fondo puede ser de muchas maneras. Podemos tocar fondo porque nuestra vida, por propio comportamiento, nos lleve a un punto que supone ese fondo. Lo típico en lo que solemos pensar es una mala racha, una adicción… pero yo he llegado a pensar ahora, por lo que he pasado que también el hecho de haberme visto “en el quicio” como a mí me gusta decir, me ha dado otra perspectiva de la vida. Yo “toqué fondo” cuando estuve a punto de partir. Por eso ahora cualquier cosa me ilusiona, y me paso el día riendo. Ya me reía antes, ahora más. El mero hecho de estar viva es grande. Es tal mi situación de gozo que he llegado hasta agradecer esto que me ha pasado porque me ha cambiado la perspectiva de tal forma.

Haré, como dice alguno, por dotar a cada momento de lo mejor que pueda para, así, esperar siempre un futuro mejor. Algunos a mi alrededor han dicho que no existe ni el pasado ni el futuro, sólo existe el presente, y por lo tanto hay que vivir siempre ese presente de la mejor manera posible. Yo antes era muy perfeccionista. Siempre lo he sido, pero ahora me doy cuenta de que lo que vivimos en todo momento, EN TODO MOMENTO, es el presente. Antes era muy dada a hacer planes, a planificar, ahora dejo que la vida me lleve. No voy a dejar de vivir por estar tan absorta en planificar lo que igual nunca vivo.

Yo, también, tuve un momento, cuando estaba en el Hospital Santa Clotilde de Santander, en el que me quería suicidar. Posiblemente sería por alguna medicación o simplemente porque mi cabeza, mi mente, no funcionaba de manera debida. ¡Qué terrible error hubiera sido ese de haberlo hecho! Como dijo el Hamlet de Shakespeare que dudaba si quitarse la vida o no. Ser o no ser. “To be or not to be” Pero piensa, que si en ese sueño, que es la muerte “but in that sleep of death, what dreams may come, when we have shuffled off this mortal coil” sueñe algo tan terrible cuando ya no pueda despertar.

Así que ahora aprovecho todo el tiempo que tengo, y por eso no me alcanza. Antes hacía mil cosas y me daba el tiempo. Ahora no hago nada y no es suficiente. Me gusta escribir por eso. Porque puedo dejar libre mi mente y dejarla flotar. Puedo decir todo lo que quiera y, siempre, por supuesto, que no ofenda a nadie, hablar, hablar y hablar. Aunque sea sobre nada en concreto, simplemente hablar…

Soy feliz ahora transmitiendo a otros mi alegría, no haciendo nada, sino simplemente siendo.

Yolanda Canales

Lo que no Mata Engorda

Acerca de como esto que he pasado lo he convertido de algo malo (pésimo) en algo grande (maravilloso). Bueno, mi razón para escribir este post en concreto, es porque quería tener por escrito, de modo sencillo y a mano algo para poder explicar a la gente quien soy cuando las circunstancias me limitan. Básicamente los 140 caracteres. Que sí, son muy buenos porque obligan a usar el idioma, o los idiomas, con extrema sencillez y precisión pero coartan e impiden una explicación más completa cuando esta se requiere. Últimamente necesito explicarme mucho y los 140 caracteres no están en consonancia con mi verborrea. Aunque utilizo tanto Facebook como Twitter este último aúna la agilidad con la extrema dificultad para poderme explicar detalladamente en todo. Quería tener a mano un mecanismo que me posibilitara simplemente pinchando un enlace poder explicar detalladamente quien soy y como estoy, y, claro, por qué estoy así. Aunque en este blog puede que ya haya hablado sobre mí, pero a ratos, a cachos solamente, quería exponer claramente todo. A medida que han ido pasando los días, desde que ya me presenté en mi primer post, donde explico quien soy y saludo desde el “Rincón de Yoli” mis posts se han ido tornando más complejos, mis explicaciones más largas. Es curioso porque en esto se puede ver el desarrollo de mi mente. Todo lo que quiero decir y lo que quiero trasladar, no puedo plasmarlo en el papel o a través del teclado porque mis procesos mentales van a un ritmo más veloz que mis manos. Las dos razones por las que me senté a escribir esto en concreto– Explicar mi historia de manera resumida y clara, que es lo que ahora me interesa, y lo que me lo provocó que fue ver ayer un enlace en Facebook que ponderaba sobre lo grandísimo y grandioso del universo. Parece ser que lo que yo he tenido, esta terrible experiencia, me ha puesto más en consonancia con la Creación y con mi Creador. Entonces pensé que esta situación tan terrible, tan terrible, me ha permitido darle la vuelta y sacarle todo el jugo.

He escrito un “libro” acerca de esto que he pasado y donde declaro que he necesitado de ayuda para poner en forma, en orden, todos los acontecimientos para saber exactamente todo lo que había pasado. Lo voy a contar de manera escueta y sencilla aquí para que se sepa exactamente lo que ocurrió.El seis de Octubre del 2012 sufrí una hemorragia cerebral. Se me llevó a Valdecilla, y cuando ya se me daba, parece ser, que por perdida, (he oído por ahí decir, que no daban los médicos un céntimo por mi) me volvió a repetir el derrame. Los derrames estaban provocados por lo que se llama un MAV (Malformación Arteriovenosa). Sufrí además varias infecciones, en el pulmón y en el cerebro. Finalmente me operaron, extirpándome el MAV del cerebro, y posteriormente estuve varios meses en coma. Ya digo, el derrame inicial le tuve el 6 de Octubre del 2012, y allí (incluso antes, porque no recuerdo nada, ni los dolores de cabeza, ni ninguno de los acontecimientos) desapareció mi recuerdo, mi memoria. Vuelve en Julio del 2013.

Mi pregunta fundamental, la que hago al aire – a quien me sepa contestar – es ¿DÓNDE ESTUVO MI MENTE? durante todos esos meses. No durante los aproximadamente cuatro que estuve en coma sino durante el resto. Puedo recordar cosas que ocurrieron de antes de esas fechas. Recuerdo toda mi infancia. Recuerdo dos idiomas, los míos; soy bilingüe. Recuerdo el inglés y el español, incluso palabras del francés que estudié en el colegio, del italiano que también estudié, de las cuatro palabras de alemán que oía en el camping de Noja donde trabajaba. Y sin embargo no recuerdo ese tiempo del seis de Octubre de 2012 a Julio del 2013.

Yolanda Canales